Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

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1608
Legislatura: 1894-1895 (Cortes de 1893 a 1895)
Sesión: 15 de marzo de 1895
Cámara: Congreso de los Diputados
Discurso / Réplica: Réplica
Número y páginas del Diario de Sesiones: 84, 2262-2263
Tema: Explicaciones sobre la situación del crucero Reina Regente

El Sr. Presidente del CONSEJO DE MINISTROS (Sagasta) : Pido la palabra.

El Sr. PRESIDENTE: La tiene S. S.

El Sr. Presidente del CONSEJO DE MINISTROS (Sagasta): Bien quisiera el Gobierno que la noticia indicada por el Sr. Díaz Moreu sobre arribo del crucero Reina Regente a las islas Canarias se confirmase; pero pasta ahora no ha tenido confirmación.

Voy a tener el honor de leer al Congreso los últimos despachos telegráficos que sobre este asunto ha recibido el Gobierno de S. M.

Del Ministro de Marina:

"Crucero Regente salió de Tánger domingo a once horas mañana.

Careciendo noticias, dispuse saliese en exploración crucero Isla de Luzón desde Algeciras, recorriendo costa África; hoy mando salir de Cádiz crucero Alfonso XII en otra exploración; noticias inseguras por estado líneas telegráficas con puertos costas España y Portugal . No seguí con Ministro Fomento a Sevilla, juzgando conveniente en estas circunstancias mi presencia en Departamento: mañana saldré en expreso para ésa."

"Participe Sr. Presidente Consejo que envié y están en exploración los cruceros Isla de Luzón y Alfonso XII, y sigo careciendo noticias del Reina Regente, que salió de Tánger a las once mañana domingo.

Lo digo a V. E. en virtud de su A. D. de ayer."

Del Ministro de Fomento:

"Acabo llegar a Sevilla: el Ministro de Marina se ha detenido en San Fernando por la incertidumbre del paradero del Reina Regente y para poder con mayor facilidad adoptar medidas.

Recibo los dos telegramas que trasmito al Ministro de Marina, y dicen : "Algeciras 13 (2 tarde) : comandante marina. - Según manifiesta comandante del Luzón, saldrá inmediatamente para Ceuta a inquirir noticias y recorrer luego costa Marruecos del Estrecho, ensenada de Tánger y Jeremías y costas españolas al mismo Estrecho desde Trafalgar a Algeciras."

"Algeciras 13 (2,40 tarde).- Comandante de marina.- Ayudante marina Tarifa me manifiesta en telegrama de hoy acaba ver un trozo pequeño y vaina bandera con letrero Regente, y un soporte madera de aguja Thompson núm. 1 .937, arrojado por el mar al arrecife camino islas Palomas, todo lo cual se ha recogido.

El Ministro de Marina se proponía reunirse conmigo mañana en ésta para seguir a Madrid."

Del jefe del centro telegráfico:

"No hay más noticias que las que comuniqué esta madrugada. Crucero Alfonso XII va a salir en este momento. De Algeciras salió el Luzón. Ni en Tánger, Tarifa, Cartagena ni Algeciras se tienen noticias algunas. Los encargados de dichas estaciones tienen orden de, tan pronto como sepan algo, participarlo seguidamente. El de Tarifa participó a las dos de la mañana que el pedazo de madera encon-[2262] trado, que se cree sea apoyo de una aguja galvanómetro Thompson, no puede precisarse a que buque puede pertenecer; el trozo de gallardete hallado parece ser del Reina Regente. Semáforo Tarifa no vio zarpar ni pasar dicho buque. Dicen marinos que al salir de Tánger el domingo el Reina Regente, una hora próximamente antes de desencadenarse la tempestad debía haber tomado el fondeadero de Puente Mayorga; pero éstos son dichos marinos, sin que sepan con certeza qué rumbo tomó el buque al zarpar de Tánger."

Estas son las únicas noticias que el Gobierno tiene. Después ha sabido, como el Sr. Moreu dice, que corrían rumores de que el Reina Regente había llegado a Canarias. Con este motivo he tratado de buscar comunicación con Canarias ; el cable está interrumpido y también la comunicación con Inglaterra, porque, según me dicen, hasta ahora hay veinte cables rotos; pero hay medio de comunicarse con Canarias por Lisboa, Cabo Verde y América.

Hemos buscado esa comunicación, y esperamos contestación. Y después de haber hecho estas averiguaciones, he procurado averiguar también la noticia del arribo del Reina Regente a Canarias, la cual es una presunción y no tiene fundamento alguno.

El Reina Regente salió, como dicen los telegramas, el domingo de Tánger al medio día, y a la hora y media, es decir, sobre las dos de la tarde, se desencadenó la tormenta, una de las mayores que se han conocido en aquellos mares.

No extrañó a nadie que no llegara el Reina Regente a Cádiz en el mismo día, porque se creyó que, a consecuencia de la tormenta, tomaría rumbo mar afuera para capear la tempestad en alta mar; llegó el lunes, y como la mar estaba también tremenda, tampoco extrañó que el buque no llegara a Canarias. Pero cuando llegó el martes, en que el mar, sin estar bueno, se hallaba en estado capaz de que el buque llegara a Cádiz, empezó la alarma y la incertidumbre por lo que pudiera haber ocurrido al Reina Regente, puesto que se recibieron noticias de Tarifa de que entre los restos que la mar arrojaba de muchos barcos de todas clases y lanchas pescadoras que han perecido, se encontraba algo que parecía haber pertenecido al Reina Regente, lo cual aumentó la alarma de las autoridades.

Con este motivo se han tomado las precauciones y medidas necesarias para averiguar cuál es la suerte del Reina Regente. No lo sabe el Gobierno, como han oído los Sres. Diputados por los partes que acabo de tener el honor de leer, y, por tanto, está en la misma ansiedad que está el país, porque se trata de una desgracia horrible, si es que ha ocurrido, no sólo por la pérdida del barco, uno de los mejores que tiene la escuadra española, sino porque en él va una brillante oficialidad y una numerosa tripulación. Y esta incertidumbre produce una ansiedad mortal en el país, y más aún en las familias de la tripulación del Reina Regente, en cuyo ánimo, como en el de todos naturalmente, alternan la esperanza y la desesperación.

Nadie desea más que el Gobierno salir de este estado de ansiedad en que el país se encuentra, para lo cual está buscando todos los medios que estén a su alcance, a fin de averiguar en último resultado cuál es la suerte del Reina Regente.



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